CREAN REDES INALÁMBRICAS QUE INTERCAMBIAN DATOS ENTRE COCHES EN MOVIMIENTO.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Málaga (UMA) ha iniciado el desarrollo de un sistema de redes inalámbricas cuya función es facilitar el intercambio de informaciones útiles, tales como el estado del tráfico o la temperatura de la pista, entre vehículos en movimiento.
Como una especie de internet sobre ruedas, este grupo de investigación dirigido por el profesor de la UMA Enrique Alba está trabajando en un sistema de redes que pretende apoyarse en infraestructuras propias del mobiliario urbano, "como un semáforo, que sirve perfectamente como punto de conexión".
"Tanto cuando los vehículos se crucen como cuando estén parados, podrá haber trasmisiones de información", ha explicado a Efe el experto, que considera que las redes basadas en la comunicación entre pares sin servidor "tienen mucho futuro".
Técnicamente, según ha precisado Alba, la opción más barata es que el usuario tenga un dispositivo portátil que haga las veces de antena, "pero lo ideal es que el coche tenga capacidad de procesamiento por sí mismo, un ordenador con capacidad de comunicación".
Además de este proyecto, el grupo está centrado en uno más global denominado Diseño Inteligente de Redes Inalámbricas de Comunicación (Diricom), cuyo objetivo es resolver y delimitar problemas en las redes de comunicación con y sin infraestructuras.
"Nos encargamos de delimitar problemas en ambos dominios para abordar con sistemas inteligentes su resolución", ha precisado el director del proyecto.
Respecto a las redes con infraestructuras, el grupo se encarga de asignar automáticamente frecuencias a los transmisores y su localización dentro de una ciudad, "analizando sobre el mapa qué lugares son los mejores para instalar estos equipamientos", ha señalado Alba.
En concreto, ya han elaborado diseños de redes con infraestructuras para ciudades específicas como Denver o Los Ángeles, en Estados Unidos, y varias localidades de Bélgica y Holanda.
"Para una ciudad como Los Ángeles hacen falta unos 40.000 terminales de transmisión o recepción, aunque ya sólo 2.000 es un número que exige que cualquier procedimiento automático de intercambio de información esté muy bien diseñado", ha indicado el profesor universitario.
En cuanto a las redes sin infraestructura, Alba ha resaltado que "ofrecen muchísimos desafíos y posibilidades, puesto que establecen directamente las conexiones entre los terminales"; y es en este grupo donde se enmarca el proyecto de intercambio de información entre coches en movimiento.
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