TOYOTA LAND CRUISER 200

Un todo terreno de lujo pensado para el campo
Toyota Land Cruiser 200


El Land Cuiser 200 es el nuevo todo terreno de Toyota, que ocupa el lugar del HDJ 100 (que dejó de venderse en 2006). El 200 puede comprarse, desde 88.300 euros, con un motor V8 Diesel y un V8 de gasolina.
Toyota Land Cruiser 200

El 200 tiene unas dimensiones mayores que el antiguo HDJ 100; de hecho, es uno de los modelos más voluminosos del mercado español. Mide 4,95 m de longitud, 1,97 m ancho y 1,86 m de alto; la distancia entre ejes es 2,85 m.

Aunque tenga un precio elevado (similar a algunos todo terrenos de lujo, orientados a la carretera) y un equipamiento cuantioso, el 200 está pensado para que dé un buen resultado en terreno agreste y sobre superficie blanda. Esto no significa que no tenga un buen comportamiento en carretera.
Toyota Land Cruiser 200


Este todo terreno tiene siete plazas distribuidas en tres filas de asientos, con tres plazas en la segunda fila y dos en la tercera. El maletero no es acorde a las dimensiones exteriores: sólo mide 701 l en configuración de cinco plazas.

Tiene tracción total permanente (con un diferencial central Torsen bloqueable manualmente) y reductora (conectable en marcha hasta 5 km/h).
Toyota Land Cruiser 200


En condiciones normales de adherencia, las ruedas del eje delantero reciben un 40 por ciento de la fuerza del motor. Según cambien las condiciones de agarre, las ruedas delanteras pueden recibir hasta un 50 por ciento de la fuerza del motor, mientras que las traseras pueden recibir hasta un 70 por ciento.

Para facilitar la conducción por terreno agreste, tiene algunos sistemas interesantes. Por ejemplo, uno que mantiene la velocidad de marcha constante (entre 1 y 5 km/h), para que el conductor sólo tenga que ocuparse del volante, en zonas complicadas.

Puede comprarse con dos motores de ocho cilindros en «uve», uno Diesel y otro de gasolina. Con ambos motores, el 200 tiene unas prestaciones acordes con su potencia y peso (más de 2.600 kg).

El motor de gasolina es de inyección indirecta y tiene 4,7 l de cilindrada y 288 CV de potencia máxima. El Diesel es de inyección directa múltiple y tiene dos turbocompresores variables, 4,5 l de cilindrada y 286 CV de potencia máxima. El cambio es automático de cinco velocidades (en el gasolina) o de seis (en el Diesel).

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