DECISIONES DEL CONSEJO MUNDIAL DE LOS DEPORTES DEL MOTOR DE LA FIA.

En el consejo mundial de la FIA de ayer no solo se habló de Fórmula 1, sino que también se tomaron importantes decisiones para el futuro del enfermo mundial de rallyes. En un movimiento de mesura y frugalidad, la FIA se ha acabado decantando por los S2000 atmosféricos como los coches del futuro para el WRC.

La próxima temporada se permitirá la participación de los S2000 y de los actuales WRC, pero a partir de 2011 todo quedará reservado para los nuevos coches sin sobrealimentación. Los S2000 de 2010 serán iguales reglamentariamente hablando a los del IRC actual, pero para las temporadas 2011 y 2012 se les permitirá incluir un kit de modificaciones aerodinámicas reguladas por la FIA para mejorar su rendimiento.

La lectura de este planteamiento es complicada. Para empezar, dado el rendimiento actual de los coches, se hace complejo que el año que viene un S2000 pueda rendir a la altura de un WRC, así que en 2010 lo más seguro es que los gallos del corral (Citroën y Ford) sigan con sus coches de este año luchando por proclamarse campeones del mundo.

De esta manera no sería hasta 2011 cuando los S2000 estarían en condiciones de ser los coches insignia del mundial. A partir de 2013, la FIA propone usar motores sobrealimentados de 1,6 litros (como en el WTCC propuesto para esos años también). La duda que nos queda es qué opinarán pilotos como Loeb, que echaron pestes sobre los S2000 atmosféricos. Lo positivo es que el mundial abre sus puertas a muchos nuevos fabricantes que actualmente están en el IRC y podrían dar el salto al WRC sin apenas tener que afrontar sobrecoste alguno. ¿Qué pasará entonces con el IRC? ¿Con esta medida el WRC matará al IRC? ¿Fabricarán Citroën y Ford un S2000? ¿Se irá Loeb de los rallyes como ya amenazó si venían los S2000 atmosféricos? La solución a todos los enigmas tendrá que esperar.

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